La Facultad Nacional de Salud Pública Héctor Abad Gómez de la Universidad de Antioquia realizará la octava versión del Congreso Internacional de Salud Pública Justicia Social, Derechos Humanos y Equidad en Salud los días 27, 28 y 29 de noviembre de 2013 en Plaza Mayor Medellin, Convenciones y Exposiciones, en el marco de la celebración de los 50 años de vida académica de la dependencia.
PRESENTACIÓN
La conformación de la Comisión de Determinantes Sociales de la Salud de la Organización Mundial de la Salud en 2005, posicionó en la agenda global el discurso sobre la naturaleza social de la salud. Si bien este planteamiento se remonta al movimiento de la medicina social europea del siglo XIX y tuvo especial desarrollo en Latinoamérica y otras regiones en el siglo XX, se vio relegado por el discurso economicista neoliberal que orientó las reformas de los sistemas de salud durante las dos últimas décadas del siglo pasado. La propuesta de la Comisión avivó el debate en el campo de la salud pública, como consecuencia de las diferentes perspectivas teóricas, epistemológicas y políticas.
Ese debate suscitado por la Comisión, tiene su núcleo central en el terreno de la justicia, en la medida en que fundamenta su propuesta en una perspectiva de equidad en salud. Para la Comisión, la equidad sanitaria “puede definirse como la ausencia de diferencias de salud injustas y evitables o remediables, entre poblaciones o grupos definidos y constituye una categoría moral profundamente anidada en la realidad política y la negociación de las relaciones de poder social”. Más adelante puntualiza: “Gran parte de los debates recientes en torno a la equidad en materia de salud han incluido modelos de justicia social”. Así que para entender el debate entre “determinantes” y “determinación” de la salud, es necesario comprender el debate sobre la justicia social.
La justicia social tiene que ver con las condiciones necesarias de orden individual y social para que las personas puedan satisfacer sus necesidades vitales, desarrollar sus capacidades y, en general, puedan contar con las oportunidades para realizar sus aspiraciones y deseos de salud y bienestar. A la justicia social le incumbe la forma como la sociedad se estructura y se ordena para garantizar el desarrollo humano y la seguridad social, y para esto se interesa por las razones que determinan las distribuciones injustas de bienes y cargas en la sociedad, al interior de los países y en el ámbito internacional. La justicia social no puede pensarse por fuera de la justicia global y el proceso actual de globalización.
El derecho a la salud también concreta esta discusión, porque las dos concepciones vigentes en el debate actual, la de la salud como derecho que se realiza en el mercado, y la de la salud como derecho fundamental, implican fundamentos divergentes de justicia distributiva y de equidad sobre los cuales se formulan las políticas públicas. Es así como las reformas de política social y de Salud implantadas en varios países de América Latina –Colombia entre ellos- en las dos últimas décadas, proponen una justicia distributiva mínima y priorizan la sostenibilidad financiera de los sistemas de salud sobre la realización del derecho porque éste depende de la posición socio-económica. En contraste, para el Estado Social de Derecho todos los derechos humanos son derechos fundamentales cuya realización universal está basada en una justicia distributiva sólida en la cual es el Estado y no el mercado, el principal garante de la inclusión social
Esta situación se hace más compleja si se reconoce que la salud no es solo la ausencia de enfermedad. Más aún, que la salud puede entenderse como un logro y en este sentido sería parte del bienestar y de las aspiraciones individuales y colectivas, pero también puede entenderse como medio para lograr dicho bienestar y aspiraciones. ¿Cuál es la diferencia entre salud y bienestar, entre salud y desarrollo humano, entre salud y la vida que se valora? ¿Es la salud un funcionamiento o una capacidad, o ambos estrechamente relacionados?
En el contexto de un país como Colombia, que se encuentra en la búsqueda de un nuevo modelo para comprender y cuidar la salud de su población, se hace necesario reconocer y aplicar de la mejor manera estos principios y orientaciones universales en beneficio de los ciudadanos.
PROPÓSITO
Generar un espacio de encuentro de actores públicos, privados, académicos, gubernamentales y no gubernamentales para discutir las implicaciones que tiene para la salud pública asumir una perspectiva fundada en la justicia social, los derechos humanos y la equidad en salud sobre su desarrollo teórico, así como para la formación del talento humano, su práctica y en definitiva sobre la salud del sujeto y de las poblaciones en las que se desarrolla su quehacer profesional e institucional.